Guadalupe

Narra la tradición que, allá por el siglo XIV, un pastor llamado Gil Cordero encontró por indicaciones de la Santa Virgen una talla de la misma junto a la orilla del río Guadalupe. Y las obras milagrosas que llevó a cabo la santísima llevaron a que le construyesen una ermita para su culto en ese mismo lugar.

En 1330, el mismísimo rey Alfonso XI se encontró con la modesta ermita, y, años más tarde, en 1340, se encomendó a esta virgen justo antes de su grandiosa victoria en la Batalla del Salado, por lo que decidió engrandecer la iglesia de Guadalupe y añadirle nuevos edificios para acoger a los peregrinos que se acercasen a ella. Desde este momento el santuario se convirtió en un importante centro de peregrinación y rápidamente creció su devoción, convirtiéndose en el más importante de la Península Ibérica solo por detrás de Santiago de Compostela, condición que mantiene en la actualidad.

Esta es la historia de cómo surgió este gran centro religioso que es el Monasterio de Guadalupe. Centro en torno al cual fue apareciendo una población, la Puebla de Guadalupe, nombre oficial de este municipio al este de la provincia de Cáceres.

Guadalupe ha vivido y sigue viviendo en torno a su magnífico santuario, el Real Monasterio de Santa María de Guadalupe, “Real” precisamente porque Alfonso XI no fue el único rey que se fijó en él, el monasterio era posiblemente el lugar favorito de Isabel la Católica, que aquí entregó a Colón los derechos para ir en busca de su sueño.

Y es que no es de extrañar que tan regias personalidades se maravillasen con esta joya del arte gótico-mudéjar, no es por nada que desde 1993 la UNESCO lo declarase Patrimonio de la Humanidad. Además de su preciosa arquitectura el monasterio ofrece otras maravillas, como su rica ornamentación e imaginería o las obras que guarda de artistas como Zurbarán, Goya o El Greco. Uno de los monumentos más notables a nivel nacional e internacional, gracias a la devoción que esta virgen causa al otro lado del Atlántico.

El monasterio además ofrece más a los visitantes, las principales entidades museísticas de la villa son propiedad del santuario y conforman los denominados Museos del Real Monasterio de Santa María de Guadalupe. Entre ellos destaca el Museo de Bordados; con ropas litúrgicas de entre los siglos XVI y XIX; el Museo de Libros Miniados, que exhibe códices realizados en el monasterio entre los siglos XIV y XVIII, y el Museo de Esculturas y Pinturas, que cuenta con obras de los autores antes citados entre otros.

Como hemos dicho, en torno al complejo religioso se estructura el resto de la población. Ante su puerta principal se abre la Plaza de Santa María de Guadalupe, en la que se puede encontrar una fuente que sirvió de pila bautismal para el monasterio. De hecho en ella Colón bautizó a dos sirvientes indios que trajo de América.

De la plaza surgen varias calles que evocan encanto e historia a todo el que las recorre. Merecen una visita tranquila para disfrutar de sus hermosas casas porticadas y conservados arcos que antaño daban paso al interior de la villa. Entre estas callejuelas se abre la Plazuela Tres Caños, con una fuente que data ni más ni menos que del siglo XV, y varias tiendas de artesanía. Guadalupe ha sido tradicionalmente una población de artesanos y algunos herederos de esa tradición popular siguen dejando apreciarla a día de hoy.

Este conjunto histórico de calles empedradas, casas tradicionales y centro religioso mundial no ha dejado que su belleza pase inadvertida, y así ha recibido varios galardones a esta razón. En 2017 Guadalupe fue condecorada como Primera Maravilla Rural y en 2019 resultó vencedora en la campaña “30 años de luz juntos” de la marca Ferrero Rocher, por lo que acogió la retransmisión de las campanadas de Nochevieja de la cadena Mediaset.

A las afueras del pueblo podemos encontrar otros atractivos que visitar, como la bella ermita del Humilladero; del siglo XV, o varios miradores. Y es que Guadalupe no es solamente su casco urbano. La población se halla situada a la falda de la Sierra de las Villuercas, dentro de la comarca Villuercas-Ibores-Jara, con todo lo que eso implica nivel turístico y medioambiental.

Sin duda, la visita a Guadalupe será un recuerdo que no se borrará.

Qué ver en Guadalupe

Qué hacer en Guadalupe

Descubriendo el Corazón de la Sierra de Gata
Es hora de cuidarte y disfrutar, SPA Día Completo.
Monfragüe desde la Tierra y el Agua
Alojamiento Bujíos astronómicos de Ceclavín, chozos turísticos, construidos como las antiguas viviendas de los pastores (bohíos) situados en la dehesa extremeña, a 2 kilómetros de la localidad de Ceclavín