Data del siglo XVI y fue construido por Luis Zapata, consejero de los Reyes Católicos.

Representa uno de los edificios más simbólico de la ciudad.

Se pueden apreciar algunas modificaciones en el edificio del siglo XVI, coincidiendo con la instalación del Tribunal de la Santa Inquisición en dicho edificio.

Actualmente es la sede del Juzgado de Primera Instancia de la comarca.

En cuanto a su estructura, resalta su pórtico de entrada de estilo renacentista, con arcos dobles de medio punto sobre columnas entorchadas.

Actualmente se puede apreciar su antigua entrada principal con una impactante portada gótico-flamenca. En su interior alberga un majestuoso patio de estilo mudéjar. Comparte mismo estilo de patio  que el Palacio Episcopal y las Casas Maestrales conocidos en Llerena.

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